La bondad

En este siglo la bondad es una tontera, los valores son una carga innecesaria, las responsabilidades no deben ser tomadas “tan en serio”, es obvio que es mucho mejor ir al Mall de forma indiscriminada y puntual los fines de semana que perder ese tiempo desarrollando su espiritualidad, total eso es casi absurdo para algunos pero para ustedes que han leído este llamado es el vivir día a día, aunque la noche sea más oscura o el dolor sea inaguantable los días son un regalo, algo maravilloso y no necesitan dinero ni marcas para ello, ustedes recuerdan que el compartir no es ir a persignarse a la Iglesia y después irse al mall a comer, tampoco seguir tendencias esotéricas que nos alivianen la carga y nos indiquen que si alguien esta mal es su “karma” y problema de él, a nosotros nos preocupa que alguien sufra y aunque sea mucho trabajo es algo que se debe realizar, algunos ya no están con nosotros por que incluso han muerto en esa creencia, honrémoslos recordándolos, honrémoslos no dándonos por vencidos. Algunos puede que caigamos en el camino como ellos y otros tomen nuestras responsabilidades, sigan así no se queden con sacarse fotos lindas y ponerlas en Facebook o publicar tweets lindos o compartir en medios electrónicos, recuerden siempre que los tiempos de calidad, de afecto y de compartir con su familia será lo que tengan ante tiempos difíciles, desconéctense de sus súper teléfonos, de los equipos y de las redes sociales para reconectarse con su vida, recuerden que no somos lo que compramos y consumir no es sinónimo de vivir. Conozcan a sus vecinos de edificio, ayúdense, formen comunidades y no “condominios privativos”, sean educados y no “rotos con plata” por qué un día eso saldrá a la luz, no se deje llevar por los “outlets”, “popcorn”, “lo in” o ser “fashion”, usted nació en Chile y es hispano ¿O creé que los países de habla hispana que han crecido lo hicieron a base de copiar los modismos y malas mañas de los gringos? Dejémonos de comida enlatada y revivamos las cazuelas, pasteles de choclo y las tradiciones donde la cocina no es un plato, es parte de la demostración de nuestro amor para quienes queremos, llamo a los que siguen siendo humildes a seguir siendo hijos de Dios, los exalto y los admiro por ser fieles a sus creencias, amen y sean amados, no estamos solos. No juzguen esa es tarea de otro que es más justo que nosotros.